Derecho a participar activa y pacíficamente en todas las acciones de reflexión, debate, pronunciamientos, protestas, manifestaciones, visibilidad, inclusión y respeto a favor de los derechos irrenunciables a la no violencia, la no discriminación, la igualdad, la diversidad y una vida digna libre de crímenes y odio, para todas las mujeres y niñas en el mundo, en todos los ámbitos humanos, sin censura, sin retrocesos, sin limitaciones absurdas al avance de todas las agendas feministas y de género en sus más amplias expresiones y realidades, más allá del 8M, cada día de nuestras valerosas y preciadas vidas.